Autora: Laís Vieira Lima
Un nuevo día, Una nueva mirada, Un nuevo amanecer y un nuevo pensamiento, podemos
abrir esa cajita escondida en vuestras almas con la clave de vuestra esperanza.
Al ver el viento de la agonía, podemos escoger sobrepasar todas las rimas a la inversa, llenar de brisas tiernas y no esconderse de la lectura que está ocurriendo, necesitamos sentirnos a nosotros mismos y saber que somos capaces de florecer en medio del jardín, aunque estemos cercados de las espinas, las flores pueden renacer, basta abrir esa cajita que estaba escondida a tanto tiempo y ahora nos llenar de las emociones suaves en fases.
Un nuevo día, podemos abrir ese nuevo día, aunque los dolores estén aumentados, hay un impulso dentro de ti que no te permitiría desistir, ese impulso tan alto que se llama brisa de luz, esa luz que calma y no te deja sólo en los períodos intensos, te trae momentos endulzados de alivio y florece en ti el arte de despertar incluso cuando el cuerpo está a
fadigar.
Un nuevo día es un universo a la par,
en par con su respiración, cada aire es una danza de la esperanza que baila en ti, sin parar.
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